¿Sabías que con un buen coaching empresarial puedes conseguir que tus empleados se involucren más en su trabajo o si usted mismo tiene algún problema con la gestión de su empresa, pueden ayudarle a alcanzar un mayor nivel de productividad?
¿Qué es el coaching empresarial y qué hace un coach?
El coaching se refiere a la configuración de una nueva forma de aprendizaje y gestión del conocimiento que permite a los profesionales optimizar su trabajo y su papel dentro de una empresa, así como alcanzar objetivos y mejoras en áreas relacionadas con su vida diaria, además de sus competencias generales en el lugar de trabajo.
En pocas palabras, podemos entender el coaching como un fenómeno que sirve tanto a los objetivos de recursos humanos de una organización como a la esfera profesional y personal específica de la persona que se somete al proceso, permitiendo la generación y transferencia de conocimiento para alcanzar la mejor versión de una empresa y sus componentes.
Por otro lado, el coach o mentor se encargará de guiar al profesional en el camino del autoanálisis, el descubrimiento de sus capacidades y la implicación en el crecimiento de la empresa. Por tanto, el coach será una persona con amplia experiencia en el campo de actividad de la organización, que se encargará de asesorar, guiar y servir de ejemplo durante este proceso.
¿Qué hace un coach realmente?
El desarrollo de este trabajo puede durar meses y la trayectoria que sigue normalmente sigue este patrón:
- Sesión introductoria: definición del contexto y de las áreas que se van a trabajar.
- El coach o experto determina qué aspectos de la vida del coachee están más estrechamente relacionados o tienen mayor impacto en las capacidades que el coachee necesita desarrollar para alcanzar los objetivos previstos. Los objetivos deben estar específicamente constituidos y tener un alcance concreto.
- Exploración de la situación desde un punto de vista ontológico y/o práctico, o una combinación de ambas posibilidades.
- Tras un conocimiento general del contexto actual y de las condiciones, se inicia un trabajo exploratorio, profundizando en las áreas que el coach considere más relevantes.
- Aunque se trata de un proceso que puede durar meses, es aconsejable seguir la evolución y los resultados del proceso de aprendizaje.
A quién se dirige el coaching
Aunque en esencia esta práctica sigue una línea de funcionamiento similar en todas sus versiones, en función de la finalidad específica a la que se destine el proceso de aprendizaje, pueden diferenciarse según los tipos relacionados con la gestión de una empresa:
Coaching Empresarial:
Este tipo de coaching pretende promover el desarrollo eficaz de la comunicación interna, la optimización del rendimiento laboral, la potenciación y consecución de los objetivos del equipo, etc. En definitiva, el objetivo es lograr que los empleados se involucren y adopten actitudes grupales positivas, lo que redundará en una mejor gestión de los conflictos internos.
Coaching Organizacional:
El coaching organizacional tiene la función de implicar y orientar a los participantes en el coaching en la cultura, la política y la visión de la organización. Así, este tipo de coaching se centra en solidificar en los empleados conceptos e ideas concretas de una organización, aspectos más relacionados con la esencia de la empresa que se traducen en perspectivas y estilos de vida de sus empleados que se identifican con la proyección de la organización como entidad.
Coaching Ejecutivo:
El coaching ejecutivo se define como la labor de reorientar el comportamiento y las competencias profesionales de los mandos intermedios o superiores a nivel organizativo de una empresa, es decir, se dirige a directivos o profesionales que tienen a otras personas bajo su supervisión.
El objetivo de este tipo de coaching es lograr un mayor nivel de productividad en su trabajo diario, la capacidad de gestionar la presión laboral y de conciliar las esferas personal y profesional. El objetivo es mejorar y actualizar el compromiso con el cambio de comportamiento y el papel dentro de la empresa.
Coaching Comercial y Empresarial:
Permite a los participantes desarrollar habilidades relacionadas con la escucha activa, la capacidad de comunicación y el poder, centrándose en el establecimiento de beneficios conjuntos positivos y constructivos en las relaciones empresariales.
Para concluir, puede ser una buena opción contar con un buen coach o coaching empresarial, ya que permite motivar a tus trabajadores para generar más productividad y efectividad en tu organización.
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